El Gobierno de Alemania advierte del inicio de una nueva Guerra Fría en el mundo ante la posible terminación de tratados como el INF y el Nuevo START.
“La posible terminación de acuerdos como el Tratado de las Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio de 1987 (INF, por sus siglas en inglés) y el Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (conocido como START III o Nuevo START) son asuntos que, en primer lugar, amenazan la seguridad de Europa”, ha alertado este miércoles el ministro alemán de Asuntos Exteriores, Sigmar Gabriel.
Gabriel ha formulado tales afirmaciones en una rueda de prensa celebrada después de un encuentro con expertos alemanes, rusos y de las Naciones Unidas de la Comisión sobre Desafíos en un Mayor Reducimiento de las Armas Nucleares, y ha indicado que durante la cita ha transmitido la preocupación de Alemania ante la posibilidad de una nueva Guerra Fría.
“Los peores errores cometidos durante la Guerra Fría se están repitiendo”, ha señalado, para luego alertar de que “el mundo se encuentra al borde de una Segunda Guerra Fría”.
En este sentido, ha instado a los países europeos a que participen de una manera activa en los procesos del desarme mundial, y ha vuelto a criticar al presidente estadounidense, Donald Trump, por su “lógica militarista” y por la posible salida de Washington del INF.
El INF, que prohíbe todos los misiles de crucero con base en tierra con un alcance de entre 500 y 5500 kilómetros, sirvió de referente para el control de armas en los últimos años de la Guerra Fría. La eliminación de los arsenales fue corroborada por inspecciones recíprocas realizadas durante la pasada década.
Sin embargo, en los últimos años, Washington ha acusado a Moscú de infringir el convenio. A su vez, los rusos desmienten tajantemente estas alegaciones, denunciando que es EE.UU. el que incumple el acuerdo al desplegar escudos antimisiles cerca de las fronteras occidentales rusas.
El Nuevo START, acordado en 2010 entre Rusia y EE.UU., establecía, por su parte, el compromiso de ambos países a reducir sus cabezas nucleares a una cifra no superior a 1550, la más baja de las últimas décadas, hasta febrero de 2018, entre otros puntos.
Trump, durante la primera conversación telefónica que mantuvo con su par ruso, Vladimir Putin, en enero pasado, criticó este pacto y lo consideró un mal acuerdo para EE.UU., pese a que el Nuevo START es uno de los tratados de control de armas más importantes de la historia del mundo, que facilita la transparencia nuclear “entre dos superpotencias”.