El Ejército sirio descubrió una enorme fábrica de municiones perteneciente a los terroristas del grupo takfirí Yeish Al-Islam en la ciudad de Duma, ubicada en la región de Guta Oriental, al este de Damasco, capital de Siria, han informado este lunes medios locales.
En las imágenes difundidas en los medios sirios se ven cientos de proyectiles de mortero caseros de diferentes calibres en varios estados de construcción. A la mayoría de estas armas les faltaba colocar solo el relleno explosivo (obviamente por razones de seguridad).
A su vez, agentes de la policía militar rusos y los especialistas del Centro para la Reconciliación en Siria incautaron 1,5 toneladas de explosivos en los arsenales y los zulos del grupo armado Yeish Al-Islam, ha comunicado el jefe de este Centro ruso, Yuri Evtushenko.
“En total fueron confiscados y entregados al Departamento de Armamento de las Fuerzas Armadas de la República Árabe Siria 250 minas antipersona, 25 kilogramos de trilita, 1,5 toneladas de otros explosivos, 1520 detonadores”, ha detallado Evtushenko.
El militar ruso califica de estable la situación en el arrabal damasceno de Guta Oriental y comenta que en la ciudad de Duma continúa la operación humanitaria después de que fuese liberada de los terroristas.
El pasado sábado, las fuerzas sirias anunciaron de forma oficial la liberación del último feudo terrorista, la ciudad de Duma, después de una serie de operaciones lanzadas a mediados de febrero para completar la liberación de Guta Oriental.
Las fuerzas armadas sirias han logrado recuperar el control total de Guta Oriental en momentos en que Estados Unidos, junto con sus aliados el Reino Unido y Francia, lanzó el sábado una serie de bombardeos contra ciertos objetivos en Siria.
El ataque tripartito fue promovido por el presidente de EE.UU., Donald Trump, tras acusar a su homólogo sirio, Bashar al-Asad, de haber perpetrado un ataque con armas químicas contra la población civil de Duma. El Gobierno sirio ha rechazado categóricamente esas acusaciones hechas sin ninguna prueba.
