La coalición de EE.UU. ha bombardeado una reunión de grupos armados en la provincia de Idlib, pese al alto el fuego anunciado por el Ejército sirio en la zona.
Según ha informado el opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), más de 40 miembros de facciones armadas y terroristas vinculadas a Al-Qaeda han muerto este sábado debido a un ataque de misiles cerca de la ciudad de Idlib. Se cree que detrás del ataque está la coalición anti-EIIL (Daesh, en árabe), liderada por Washington.
El ataque iba “dirigido contra una reunión entre los líderes de los grupos armados de Huras Al- Deen, Ansar Al-Tohid y otros grupos aliados dentro de un campo de entrenamiento”, ha detallado Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
La ONG, no obstante, no ha dejado claros los motivos del ataque ni si los misiles fueron lanzados desde aviones de guerra de la llamada coalición estadounidense o desde posiciones terrestres ubicadas en el norte del país árabe.
Este ataque contra la provincia de Idlib, perpetrado presuntamente por la parte estadounidense, despierta sospechas, en particular dado que se produjo horas después de que el Gobierno de Damasco anunciara un alto el fuego unilateral en esta región, el último bastión de los grupos terroristas respaldados por los países occidentales en el noroeste de Siria.
Aunque algunos informes occidentales han acusado en un principio de las ofensivas de hoy a los Ejércitos ruso y sirio, el Observatorio ha confirmado que los aviones sirios y rusos no han realizado ningún ataque aéreo o terrestre como parte del alto el fuego establecido en Idlib.
Fuentes sirias han informado que entre los terroristas muertos también hay “líderes” de las facciones reunidas en el lugar, entre ellos, Abu Mohamad al-Golani, líder de la banda extremista Hayat Tahrir Al-Sham (HTS) —liderada por el Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath Al-Sham).
La tregua en Idlib ha tenido lugar, pese a que el Ejército sirio ha logrado últimamente avances considerables ante los terroristas. Por ejemplo retomó el control de la ciudad de Jan Sheijun, uno de los fortines más importantes de Frente Al-Nusra en Idlib.
El presidente de Siria, Bashar al-Asad, alabó el 20 de agosto el éxito de las operaciones del Ejército en IdIib y confirmó que su Gobierno estaba decidido a liberar cada centímetro del país de la presencia terrorista.
