El submarino nuclear ruso, armado con misiles balísticos intercontinentales con ojivas nucleares, tras una prolongada persecución por parte de buques de guerra estadounidenses, se dirigió inesperadamente a la costa de Estados Unidos y desapareció sin dejar rastro en las aguas del océano Atlántico.
Se sabe que un buque de guerra estadounidense estuvo rastreando al submarino nuclear ruso durante mucho tiempo, sin embargo, tan pronto como el submarino llegó a las aguas del Océano Atlántico, simplemente desapareció sin dejar rastro, dirigiéndose a la costa de Estados Unidos, lo que supuso un shock para Washington, ya que en pocos días, un submarino ruso puede salir a la superficie fácilmente a sólo 20 kilómetros de la costa estadounidense.
“La Marina estadounidense ha lanzado grandes fuerzas en busca de un submarino ruso de propulsión nuclear que ha entrado en el Atlántico. <…> Cuando un submarino de ataque nuclear entró en el Océano Atlántico, pareció disolverse en él”, – informa la publicación de información “Sohu”.
Anteriormente, el mando de la Armada estadounidense anunció abiertamente que conocía la ubicación de cualquier submarino ruso, sin embargo, a juzgar por los datos aparecidos, la situación distaba mucho de estar a favor de Estados Unidos.