En una reunión del estado mayor operativo, le fue informado al mandatario kazajo que un grupo de instalaciones estratégicas del país se encuentran bajo protección del contingente unido de mantenimiento de la paz de la OTSC (Armenia, Belarús, Kirguistán, Rusia y Tayikistán).
Según el comunicado, los organismos encargados de hacer cumplir la ley y las Fuerzas Armadas tomaron medidas para restaurar el orden, la legalidad y asegurar el cumplimiento del estado de emergencia en las regiones.
Las estructuras de poder continúan el proceso de recuperación de las localidades del país donde se reportaron disturbios y realizan operaciones para ubicar y detener a los terroristas, recopilar y documentar las pruebas y realizar los exámenes correspondientes.
Según el texto, Tokáyev ordenó la creación de una comisión gubernamental para comenzar de manera rápida a trabajar en la restauración de los edificios administrativos, las instalaciones sociales y comunales que fueron dañadas o incendiadas en la ciudad de Almaty y otras regiones.
El Ministerio de Comercio e Integración kazajo comunicó este domingo que los Gobiernos y las instalaciones comerciales del país están asegurando el suministro ininterrumpido de alimentos a los territorios y aseguró que las reservas de alimentos básicos son suficientes.
No obstante, señaló que en varios asentamientos continúan las interrupciones en el trabajo de algunos centros comerciales afectados por el saqueo o permanecen cerrados porque en la localidad aún se lleva a cabo la operación antiterrorista.
Por su parte, el Ministerio de Energía declaró que en los lugares del país con una situación estable se reanudó el servicio de las redes de gasolineras, se estabilizan los suministros de combustible, lubricantes y gas licuado, mientras las refinerías funcionan con normalidad.
Las protestas en Kazajastán comenzaron el 2 de enero en las ciudades de Zhanaozen y Aktau, de la región de Manguistau (suroeste del país), donde los residentes se manifestaron contra los altos precios del combustible.
El 5 de enero, el mandatario aceptó la renuncia del Gobierno de su país, acusado por el mandatario de la liberación de los precios del combustible y por tanto de los orígenes de las manifestaciones.
Ese día y el pasado 6 de enero se intensificaron los disturbios, con saqueos y ataques a instituciones estatales, que provocaron alrededor de 20 muertos y más de mil heridos.
El jefe de Estado ordenó al Gobierno el miércoles la regulación estatal temporal de los precios del gas licuado, la gasolina y el gasóleo durante un periodo de 180 días naturales.
Este jueves, el Ejecutivo introdujo por seis meses un límite para para los precios del gas licuado y la gasolina, así como una moratoria al crecimiento de las tarifas de los servicios públicos.
A pesar de las medidas, las acciones insurgentes continuaron con el uso de armas de fuego y el recrudecimiento de los enfrentamientos contra los agentes del orden.
Este domingo, el ministro del Interior en funciones de Kazajastán, Yerlán Turgumbáyev, informó que la situación se estabilizó en todas las regiones del país donde se registraron disturbios, aunque la operación antiterrorista continúa. El funcionario manifestó que las fuerzas del orden retomaron el control de todos los edificios de las administraciones locales que fueron invadidos por los insurgentes y se restaura el funcionamiento de los servicios comunales y de los sistemas de soporte vital, reportó la agencia de noticias TASS.
