A través de un comunicado, el ente uniformado señaló (sin precisar cifra) que dicho dinero estaba escondido en bolsas ubicadas en instalaciones religiosas de esta nación centroamericana.
Según el texto, la Policía comunicó sobre el hallazgo a las autoridades pertinentes, las cuales, a su vez, iniciaron sus propias investigaciones de acuerdo con la ley para ubicar y cancelar los referidos actos ilícitos.
“El resultado de las investigaciones confirmó la sustracción ilegal de recursos de cuentas bancarias que se había ordenado por ley congelar”, subrayó el documento.
En ese sentido, comunicaron sobre la investigación de otras ilegalidades como parte de una red de lavado de dinero descubierta en diócesis de distintos departamentos nicaragüenses.
El escrito detalla que, la Fiscalía, la Superintendencia de Bancos y la Unidad de Análisis Financiero, confirmaron movimientos delictivos con fondos que, para la diócesis, ingresaron irregularmente al país y se investigan y se abrieron procesos por esos delitos.
Además, solicitaron a la Conferencia Episcopal de Nicaragua y al jefe de la Iglesia aquí, Cardenal Leopoldo Brenes, presentar los documentos en los cuales se muestren los movimientos de las cuentas bancarias de las Diócesis.
“Se ha informado en todo momento del curso de las investigaciones y se procura aclarar sobre todo lo pertinente a esta situación anómala que se deriva de los actos de traición a la patria juzgados ya”, precisó.
El escrito aludió a los actos cometidos por personajes que, como políticos, “violentaron criminalmente los ordenamientos jurídicos, financieros, sociales, del Estado y el pueblo nicaragüenses”.
De igual modo, las autoridades policiales reiteraron la continuidad de las investigaciones para lograr la transparencia en el funcionamiento y manejo de las finanzas de las referidas instituciones religiosas.