
Los movimientos sociales y de solidaridad en El Salvador convocaron ayer a defender el programa de cooperación médica de Cuba, atacado para favorecer a la práctica privada.
‘Ha llegado la hora de tomarnos las calles y movilizarnos masivamente contra la Junta de Vigilancia de la Profesión Médica, en defensa del programa humanitario y solidario Misión Milagro’, reza una nota recién divulgada.
En dicho texto, la Red de Solidaridad Operación-Misión Milagro El Salvador condenó las trabas de la mencionada Junta a los permisos gestionados por el gobierno para la labor humanitaria de los cubanos.
El grupo reveló que desde el pasado 18 de diciembre el Ministerio de Salud tramitó la solicitud de autorización a la mencionada Junta, que a diferencia de años anteriores ahora exige originales en lugar de apostillas.
‘Una paralización de la participación médica cubana afectaría directamente al pueblo salvadoreño’, alerta el comunicado, que califica de espuria la denuncia contra los galenos cubanos ante la Fiscalía General de la República.
En consecuencia, la Red emplazó a la Junta a cumplir su trabajo ‘sin ningún sesgo ideológico, interés político o económico, más si sus decisiones afectan directamente al pueblo al que deberían servir’.
Exigieron que la Junta cese la demora intencionada de las licencias para que los médicos cubanos prosigan una labor que ha devuelto la vista y la calidad de vida a decenas de salvadoreños de escasos recursos.
‘La Brigada Médica Cubana brinda una atención gratuita, de calidad y de primer nivel a toda la población salvadoreña; sin distingo ideológico, económico, político, religioso, social y cultural’, agrega la nota.
A su vez, el comunicado acusa a la Junta de Vigilancia de eliminar el derecho de los enfermos visuales en El Salvador a recibir una atención gratuita y de calidad.
‘La hacemos responsable (la Junta) de las afectaciones a la salud visual de todas las personas que se atienden en el Centro Oftalmológico de San Vicente’, agrega el texto, a propósito de la interrupción del programa.
Desde su inauguración, en 2015, dicha instalación realizó casi 142 mil consultas pre y postoperatorias, y unas 23 mil cirugías de cataratas, pterigio y retinopatías completamente gratis.
Por el contrario, en la práctica privada una de esas intervenciones ronda los mil dólares, casi cuatro veces el salario mínimo en esta nación centroamericana.
Antes de la inauguración del proyecto de cooperación oftalmológica, en El Salvador apenas se realizaban 175 cirugías anuale