Esas fuerzas forman parte de la coordinación previa con las partes del tratado de paz con Israel, firmado en 1979, que nos comprometemos plenamente a mantener, dado que nuestro país nunca violó ningún acuerdo a lo largo de su historia, señaló en un comunicado el Servicio de Información Estatal de Egipto (SIS).
La declaración tiene como telón de fondo reportes de prensa sobre el despliegue adicional de tropas egipcias en la región, lo cual Israel considera una violación del pacto.
La institución también reiteró la condena de El Cairo “a la expansión de las operaciones militares (israelíes) en Gaza y al desplazamiento de los palestinos de sus territorios”.
Ratificamos nuestro apoyo al derecho del pueblo palestino a establecer un Estado independiente, con las fronteras de 1967 y con Jerusalén Oriental como su capital, destacó.
La pasada semana, el presidente egipcio, Abdel Fattah El-Sisi, llamó a la unidad árabe e islámica para detener “la creciente arrogancia israelí” y condenó los crímenes de ese país en los territorios palestinos.
El gobierno de Benjamín Netanyahu amenaza la estabilidad de Oriente Medio y sus acciones representan una grave violación de la paz y la seguridad internacionales, afirmó el mandatario al intervenir en una cumbre de emergencia de naciones musulmanas, celebrada en Doha para abordar una respuesta al reciente ataque israelí a Qatar contra la dirección del grupo palestino Hamas.
La tensión entre Egipto e Israel aumentó a principios de este mes tras unas declaraciones atribuidas a Netanyahu sobre la expulsión de los palestinos de Gaza a través del cruce fronterizo de Rafah.
En respuesta, el Ministerio de Relaciones Exteriores egipcio condenó tales comentarios y recordó los continuos intentos de Netanyahu de prolongar la guerra en Gaza y de afianzar la inestabilidad en la región.
Días antes, la tensión bilateral por la guerra en Gaza subió un peldaño más tras la revelación del diario Israel Hayom sobre la decisión de Netanyahu y de su ministro de Energía, Eli Cohen, de reconsiderar un acuerdo de exportación de gas a este país norafricano.
“Si quiere cancelarlo, que lo cancele, siempre y cuando pueda soportar las consecuencias” económicas, respondió Diaa Rashwan, jefe del SIS en declaraciones a la televisora Al-Mashhad TV.