Jon Iurrebaso Atutxa.— Después de la firma del preámbulo del nuevo estatus o estatuto político para vascongadas, emanado y sustentado en la partición de Euskal Herria, no podía venir sino otro movimiento de deriva. Y no olvidemos que aquel estatuto (rechazado en Euskal Herria) transformó la dictadura española en una dictadura burguesa (en clave monárquica y parlamentaria) servil a los dictados del capital peninsular, continental e internacional.
Mirando un poco hacia atrás, algunos aceptaron la ley de partidos de nuestro enemigo español. Aceptaron seguir el juego post-conflicto (aún sin resolver) en base a las ideas fuerza de nuestros enemigos. Esto es, “consecuencias del conflicto” (irresuelto, repetimos), “victimas” (obviando que la primera victima es Euskal Herria, y estando sin resolver el futuro y supervivencia del PTV), “no tenía que haber ocurrido…” (Sólo hemos defendido, defendemos y defenderemos a nuestro pueblo trabajador y a nuestros semejantes), etc. Es terrible cuando se dice perseguir… en verdad, no sabemos qué, pero se supone que la “liberación” de Euskal Herria.
Y ese hilo de inserción en los sistemas español y francés del conjunto de la actual Izquierda Abertzale Oficial, nos conduce a la última idea, propuesta, iniciativa, postureo proclamada por el portavoz de EHBildu. De entrada decimos que es funesta para Euskal Herria y, sobre todo, para su Pueblo Trabajador Vasco.
Seremos breves. EHBildu pide una gran alianza electoral que incluya desde PNV a la CUP de cara a las próximas elecciones generales, para hacer frente al PP, Cs y Vox… y reclamando lo que sabe que España y Francia (y sus socios aliados no pelearán) negarán a Euskal Herria. Articula un galimatías reformista y siervo de los Estados español y francés con respecto al futuro de Euskal Herria, basado en la ley del que nos ocupa y explota y nos niega como nación, como sujeto diferenciado y nos promete represión secula seculoron no, lo siguiente.
Es decir, a estas alturas de la vida, articulamos como paso cualitativo estratégico para Euskal Herria, asociarnos con la social democracia vasco española, catalana, gallega, burguesía vasca, progresía españolista, alguna sensibilidad independentista y de izquierda (¿)… y el lema de fondo es algo así como “democracia” sí o derecha española no. Esto es, el PSOE, por ejemplo y por ser breves, es un buen compañero de fatigas…
Es evidente que ese movimiento interclasista y abanderado por la burguesía y por la socialdemocracia no puede ni siquiera arañar una pared enemiga por muchas impurezas y avatares que tenga en su composición. Es otro movimiento más que el gran capital y la burguesía española, francesa y vasco-española pueden aceptar pues al fin y al cabo, y en la práctica, nada de ello socava su sistema y estatus-quo.
No hay camino de liberación nacional y social fuera de los intereses actuales y futuros del Pueblo Trabajador Vasco. Jamás la socialdemocracia ni la burguesía vascas (aún menos otras) lucharán sino es por sus intereses.
Convenimos en que la madre del cordero es qué hacer, cómo hacer, con quién hacer y cuándo. Pongámonos manos a la obra y, modestamente, una sugerencia, no juguemos a la lotería pues sólo les toca a cuatro y, con los pies en el suelo, pensemos que entre todos y todas lo haremos. No mañana, pero lo conseguiremos. Por la construcción del Movimiento socialista revolucionario vasco de liberación nacional y social, adelante.