
Según publicó el domingo el diario libanés Al-Diar, varios funcionarios saudíes habían hablado al respecto con algunas figuras libanesas cercanas a Arabia Saudí, asegurando que Riad y Damasco ya reanudaron las relaciones bilaterales.
El informe precisa que los funcionarios saudíes calificaron de incorrectas las anteriores políticas de la monarquía de los Al Saud hacia Siria y pidieron a las figuras libanesas revisar la postura que tienen respecto a este país y que dejaran de lado los aspectos negativos de los pasos previos.
Las figuras libanesas, por su parte, destacaron un tuit que, recientemente, Ahmad Yarolá, propietario del periódico kuwaití Al-Seyassah, había difundido en el que ofrecía disculpas a Bashar al-Asad y al pueblo sirio, reconociendo que los países árabes ribereños del Golfo Pérsico habían enviado terroristas a Siria y los apoyaron. Este diario desempeñaba el papel del primer baluarte contra este país y su gente durante la guerra contra el país levantino.
La parte libanesa también afirmó que la reanudación de las relaciones del reino con Siria en todos los niveles beneficia a ambas partes, especialmente a El Líbano.
Los países árabes, que habían cortado sus lazos con Siria desde 2011, ya se inclinan a restablecer los nexos con Damasco debido a los cambios surgidos en Siria, en la región y en sus alianzas internacionales.
La reelección de Al-Asad en los comicios presidenciales del 26 de mayo de este año 2021, hizo que los líderes árabes aceptasen esta realidad: Él sigue en el poder.
La apresurada retirada de Estados Unidos de Afganistán también reforzó esta creencia entre las autoridades árabes de que deberían trazar su propio rumbo. Ellas han anticipado el enfoque y la prioridad de Washington, que ahora enfrenta un desafío con China y está lidiando para reconstruir su economía tras la pandemia del nuevo coronavirus.