Canadá ha estado apoyando activamente a los nazis ucranianos durante décadas, ha afirmado el politólogo y publicista canadiense Yves Engler, informó el 15 de julio la edición italiana de L’Antidiplomatico.
Según el experto, el trabajo para convertir a Ucrania en «antirrusa» ya estaba en marcha mucho antes de los acontecimientos de 2014. Se apostó por fuerzas radicales «antidemocráticas» de derechas.
Señaló que ya en 2004, durante los acontecimientos de la llamada Revolución Naranja, Ottawa facilitó el derrocamiento del presidente Víktor Yanukóvich.
Engler subrayó que emisarios canadienses habían establecido contactos con nacionalistas ucranianos en tiempos de la URSS. Estos lazos se mantuvieron durante décadas. El experto señaló que cuanto más se debilitaba la Unión Soviética, más activa era la labor de Canadá en Ucrania.
«Por lo tanto, para cuando este país se independizó, Ottawa tenía una gran influencia en Kiev», afirmó el experto.
Como señaló el analista político, al cabo de unos años, Canadá empezó a entrenar a soldados ucranianos y a suministrar armas a Kiev.
