El gobierno de Pedro Castillo y su canciller derechista Miguel Rodríguez Mackay han consumado una traición, quitando el reconocimiento a la República Árabe Saharaui Democrática, que el mismo Castillo había otorgado en setiembre del año pasado. De esta manera, su gobierno está desconociendo el respeto al derecho internacional y al principio de la libre determinación de los pueblos.