Todos los buques que naveguen hacia puertos ucranianos en el Mar Negro serán considerados por Rusia como posibles portadores de carga militar, declaró el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Vershinin, en una conferencia de prensa celebrada en Moscú el 21 de julio.
Vershinin declaró que se había tomado la decisión de someter a inspección a todos esos buques. Dijo que Rusia debe estar segura de que el buque no viene «con algo malo».
El diplomático también dijo que, en medio de la complicación de la situación, Rusia estaba trabajando en nuevas rutas para exportar sus productos agrícolas. «Se trata en gran medida de una cuestión de logística», dijo Vershinin, informando que Moscú está negociando con países africanos la entrega de cargamentos rusos, incluidos cereales. Vershinin dijo que Moscú comprende las preocupaciones de los países africanos y aseguró que todas «estas preocupaciones no sólo son comprensibles, sino que se tendrán plenamente en cuenta».
Vershinin también sugirió que las cuestiones del tránsito de buques en el Mar Negro bien podrían «discutirse durante futuros posibles contactos entre los presidentes ruso y turco, Vladímir Putin y Recep Tayyip Erdogan».
Sólo para recordarles, se informó anteriormente por el servicio de prensa del Ministerio de Defensa ruso dijo el 19 de julio que desde la medianoche del 20 de julio, después de que se detuviera el acuerdo sobre el grano y se cerrara el corredor marítimo humanitario, todos los buques que viajen a puertos ucranianos en el Mar Negro serán considerados como posibles portadores de carga militar y se considerará que participan en el conflicto ucraniano del lado del régimen de Kiev.
