El gobernante Partido Laborista de Nueva Zelanda se ha sumado al creciente peso de la opinión mundial de que reconocer el Estado palestino es un requisito previo para una solución justa.
El compromiso del Partido Laborista pasa por extender una invitación al jefe de la Delegación General de Palestina, permitiéndole presentar sus credenciales como embajador en Nueva Zelanda.
En febrero, el primer ministro de Nueva Zelanda, Chris Hipkins, se reunió con Izzat Salah Abdulhadi, quien se desempeña como jefe de la Delegación General de Palestina en Australia, Nueva Zelanda y el Pacífico.
Esta acción alinearía a Nueva Zelanda con el sentimiento predominante observado en las Naciones Unidas, donde 139 de los 193 estados miembros ya han reconocido la soberanía de Palestina.
El Partido Verde de Nueva Zelanda presentó anteriormente una moción pidiendo al parlamento que reconozca a Palestina como estado.
Organizaciones de defensa como Justicia para Palestina y Alternative Jewish Voices han expresado su apoyo a este compromiso.
“Es fantástico ver que el Partido Laborista se une al Partido Verde para comprometerse a reconocer a Palestina si es elegido. Al hacerlo, continúan la tradición de Aotearoa Nueva Zelanda de adoptar posturas independientes y de principio en cuestiones de política exterior, desde la liberación de las armas nucleares hasta la lucha contra el apartheid”, dijo el portavoz de Justicia para Palestina, Neil Ballantyne.
“Tenemos fe en que, así como los neozelandeses comunes y corrientes no estaban dispuestos a permanecer impasibles en silencio mientras el gobierno sudafricano mantenía un régimen de apartheid, no permaneceremos en silencio mientras los palestinos sufren indignidades similares y recompensaremos a los políticos que adopten esta postura valiente”, continuó.
Si bien Nueva Zelanda no ha reconocido oficialmente a Palestina como Estado soberano, ha censurado sistemáticamente la ocupación israelí. Además, Nueva Zelanda ha sido un firme defensor de la solución de dos Estados.
