El embajador israelí ante la ONU, Gilad Erdan, ha vuelto a arremeter contra los llamamientos al alto el fuego en Gaza, afirmando que Oriente Medio padece un «cáncer» que debe ser «eliminado» por completo.
«Resulta chocante que muchos miembros del Consejo de Seguridad aboguen por un alto el fuego permanente, sin pensar en las consecuencias», declaró este martes Erdan durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU.
«¿Qué creen que ocurrirá si hay un alto el fuego? Les diré lo que ocurrirá: Hamás seguirá en el poder, se reagrupará y rearmará, y pronto los israelíes se enfrentarán a otro intento de Holocausto», aseveró.
De igual forma, el vocero israelí comparó las crecientes tensiones regionales con grupos islamistas con un «cáncer» que, aunque se ha contenido durante mucho tiempo, debe ser eliminado de una vez por todas.
«Oriente Medio padece un cáncer y hasta hoy el Consejo de Seguridad solo ha hablado de dar aspirinas. El cáncer, señor presidente, no se trata con aspirinas. Ha llegado el momento de que este Consejo aborde y elimine de raíz este cáncer y no solo sus efectos secundarios», resaltó.
Durante las últimas semanas, la situación en Oriente Medio se intensificó significativamente. Aparte de la guerra entre Hamás e Israel, la zona está sacudida por los ataques de los hutíes en el mar Rojo y las medidas de represalia de EE.UU. y sus aliados contra instalaciones de los rebeldes en Yemen. Este sábado, varios asesores de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI) murieron como resultado de un ataque israelí en Damasco, capital de Siria.
Por otra parte, Teherán bombardeó el martes pasado la ciudad de Erbil, capital del Kurdistán iraquí, teniendo como objetivo a agentes del Mossad. Esa misma noche la nación persa lanzó ataques en Alepo, en el norte de Siria, contra instalaciones de la organización terrorista Estado Islámico en respuesta a un reciente doble atentado en la ciudad iraní de Kermán que dejó decenas de muertos.