En nombre del Grupo de Amigos en Defensa de la Carta de las Naciones Unidas, el diplomático expresó que “no habrá futuro sin paz, y no habrá paz sin desarrollo, lo que requiere, entre otras cosas, que se haga realidad el derecho inalienable a la autodeterminación de los pueblos que viven bajo ocupación extranjera y colonia”.
Se refirió a la situación de Palestina e hizo “un llamado urgente en favor de un alto el fuego en Gaza; y del fin de la ocupación ilegal israelí”.
“Es momento de avanzar hacia la eliminación del colonialismo en todas sus formas y manifestaciones. Es nuestro deber moral y ético concluir los procesos de descolonización aún pendientes”, agregó.
Insistió en que el verdadero multilateralismo y la aplicación, sin dobles raseros, de los principios de la Carta de la ONU, constituyen el núcleo de las relaciones internacionales y son necesarios para la coexistencia pacífica entre las naciones.
Enfatizó, igualmente, la importancia de renovar el compromiso tanto con la letra como con el espíritu de la Carta de la ONU.
Concluyó reafirmando “nuestro firme compromiso con un futuro basado en la paz, el pluralismo, la solidaridad, el desarrollo y el bienestar para todas y todos”.
