Funcionarios estadounidenses han desatado una nueva campaña contra los autos eléctricos chinos, según destaca el Global Times en un editorial. En esta ocasión han comenzado a hablar de evitar un segundo “choque chino” que podría afectar la industria estadounidense, como supuestamente sucedió principios de la década de 2000.
El medio relata que Lael Brainard, directora del Consejo Económico Nacional de Estados Unidos, afirmó en un discurso pronunciado el 23 de septiembre que a principios de la década de 2000, el primer “choque chino” perjudicó a la industria manufacturera estadounidense, y que la actual Administración está decidida a evitar un escenario similar.
Además, señaló que si los estadounidenses deciden conducir un vehículo eléctrico, “queremos que se fabrique en Estados Unidos, no en China”, agregó.
El mismo 23 de septiembre, el Departamento de Comercio estadounidense propuso prohibir el software y hardware chinos clave en los vehículos conectados en las carreteras estadounidenses, lo que, destaca Global Times, equivaldría a prohibir la entrada en el mercado estadounidense de prácticamente todos los vehículos chinos, incluidos los coches fabricados en China por General Motors y Ford.
“A la Casa Blanca le resulta cada vez más difícil mantener sus mentiras atacando a los vehículos eléctricos (VE) chinos. Según Brainard, éstos socavan la posición de la industria automovilística estadounidense en el mercado internacional. Sin embargo, la secretaria de Comercio estadounidense, Gina Raimondo, afirma que la supresión de los VE chinos ‘no tiene que ver con el comercio o las ventajas económicas’, sino que ‘se trata de una acción estrictamente de seguridad nacional'”, se puede leer en el editorial del medio de origen chino.
El Global Times subraya que mientras surgen esas campañas contra los autos eléctricos, por otro lado, medios occidentales elogian la labor de China para ‘salvar al mundo’ con su compromiso con la implementación de energías verdes.
El medio de origen chino cita dos artículos de medios occidentales como el New York Times y bne IntelliNews, en los que se exalta la labor de China para prácticamente salvar al mundo del calentamiento global al reducir sus niveles de emisiones al apostar a las tecnologías verdes, como los autos eléctricos.
Finalmente, Global Times asevera que lo que China ofrecen no son ‘choques’, sino oportunidades y avances en la producción ecológica.
“Tanto para Estados Unidos como para el resto del mundo, lo que China ofrece no es un ‘primer choque’ ni un ‘segundo choque’, sino oportunidades repetidas. A la luz de la capacidad de producción ecológica de China, no es la industria automovilística estadounidense la que está conmocionada, sino la mentalidad distorsionada de ciertos individuos en Estados Unidos”, concluye.