El bombardeo de pasquines sobre Pyongyang es una seria provocación política y una violación de la soberanía de nuestro país, pero lo más grave es el empleo de aviones sin piloto, los cuales pueden ser considerados medios militares, señaló.
En una declaración que reproduce la agencia estatal de noticias ACNC, Kim desestimó la negación del Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur de estar relacionado con el incidente y su intención de atribuírselo a activistas anti-RPDC.
La casta militar de la República de Corea no puede evadir su autoría o complicidad con esa grave violación de la soberanía de nuestro país, remarcó.
Ayer, la Cancillería de la RPDC denunció que a horas avanzadas de los días 3, 9 y 10 de octubre, drones surcoreanos dejaron caer sobre Pyongyang miles de volantes con propaganda subversiva y dijo que con ese acto Seúl cruzó “la línea roja de su conducta provocativa”.
“Será apretado sin titubeo el gatillo para la defensa de la soberanía y la seguridad” (de ocurrir otro incidente similar), proclamó.
La advertencia fue reiterada por Kim.
En caso de que los drones con basuras de agitación política anti-RPDC (…) vuelvan a agredir nuestro espacio aéreo jurisdiccional, tomaremos una fuerte acción de represalia sin importar su origen, subrayó.