Según una encuesta realizada por el Centro de Investigación de Opinión Pública, el 43 por ciento de las personas expresaron interés en apoyar a Ucrania en la guerra en curso con Rusia en el último trimestre de 2024, una disminución del 14 por ciento desde principios del año pasado.
Mientras tanto, la desaprobación de las acciones del gobierno checo en apoyo a Ucrania ha crecido al 58 por ciento, el nivel más alto desde el comienzo del conflicto en el 2022.
De acuerdo con la investigación, el seguimiento de los acontecimientos en Ucrania ha crecido significativamente a la par de la política en general.
Rusia inició desde el 24 de febrero de 2022 una operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos, según Moscú, son proteger a la población de un genocidio por parte del gobierno de Kiev y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hacia el este.
Ucrania es apoyada militarmente por la OTAN, el bloque bélico que integran 32 países, tres de ellos (Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia) poseedores de armas nucleares.
