Macron continuó con el foro en línea su cruzada para tratar de que los intereses y las preocupaciones de la Unión Europea (UE) sean considerados por Washington y Moscú en las eventuales negociaciones de paz, un proceso en el que Bruselas y Kiev han sido marginados, a partir de la ruptura con la postura antirrusa de la Casa Blanca con el regreso de Donald Trump.
El mandatario galo había acogido el lunes en el Elíseo a una decena de dirigentes de la UE, el Reino Unido y la OTAN con el mismo propósito de presionar a Trump, también con el reclamo de que Ucrania sea considerada.
Según un resumen de la videoconferencia publicado por el propio Macron en X, el objetivo alegado por el mandatario estadounidense de detener la guerra es compartido por los participantes, entre ellos Países Bajos, Rumanía, Chequia, las naciones del Báltico y Estados que no pertenecen a la UE como Noruega e Islandia, además de Canadá.
Sin embargo, acordaron demandar el papel del régimen nazi-fascista de Kiev en la búsqueda de la paz y el respeto a sus derechos, el logro de una paz “creíble” y con garantías de seguridad y que se tengan en cuenta las preocupaciones de seguridad europeas.
Asimismo, el presidente francés escribió que existe convencimiento sobre la necesidad de aumentar los gastos en materia de defensa dentro de la UE, anunciando que en esa dirección se tomarán próximamente decisiones.