
ACN. – Rodolfo Benítez Verson, representante permanente de Cuba ante la Oficina de las Naciones Unidas en Ginebra, Suiza, anunció hoy la presentación de tres proyectos de resolución cubanos relativos al derecho a la alimentación, los derechos culturales y el impacto negativo de la deuda externa en los derechos humanos (DD.HH.).
Durante su intervención en el debate general de la agenda del 58° período de sesión ordinario del Consejo de Derechos Humanos (CDH), previsto del 24 de febrero al 4 de abril, el embajador agradeció el apoyo y copatrocinio a las propuestas y afirmó que la nación antillana abogará siempre por el diálogo respetuoso y constructivo, en contraposición a los enfoques punitivos.
Cuba continuará defendiendo en el CDH la genuina cooperación internacional sustentada en la indivisibilidad de los derechos humanos, la no selectividad y la no politización, declaró Benítez Verson.
El diplomático cubano denunció los obstáculos que enfrentan la promoción y protección de todos los DD.HH., incluido el derecho a la vida y al desarrollo, las amenazas a la paz, así como la proliferación de las medidas coercitivas unilaterales.
Condenó el fortalecimiento de las plataformas neofascistas y xenofóbicas, la normalización los discursos de odio y el retroceso en derechos fundamentales, incluida la igualdad de la mujer, los derechos sexuales y reproductivos, los derechos de los afrodescendientes, las minorías étnicas y migrantes.
El embajador aseguró que el Consejo no puede permanecer impasible ante estas realidades en respuesta al reclamo mundial de buscar soluciones.
Benítez Verson denunció el bloqueo económico, comercial y financiero que impone el gobierno de los Estados Unidos a Cuba, que calificó como una violación flagrante de los DD.HH. de todos los cubanos, y debe cesar.
El CDH es el principal órgano intergubernamental de las Naciones Unidas, responsable de las prerrogativas individuales, y fue creado en 2006 por la Asamblea General para reforzar la promoción y protección de los DD. HH. en todo el mundo.
Compuesto por 47 Estados miembros, constituye un foro multilateral para abordar las violaciones de los derechos fundamentales y la situación de los países.