
La Administración Trump no tendría entre sus planes entablar acciones conjuntas con la Unión Europea (UE) contra China, algo que el bloque recientemente propuso a Washington, en un intento por evitar la introducción de gravámenes a las importaciones de bienes europeos en Estados Unidos, informó el medio, citando a altos funcionarios europeos.
«El equipo de Trump ha mostrado cero interés en hablar con nosotros sobre China», dijo una fuente de alto nivel de la UE.
«Durante meses, mientras trataban de evitar los aranceles de Estados Unidos, los funcionarios de la Unión Europea trataron de hablar con la Administración Trump sobre una acción conjunta contra China, solo para toparse con un muro de ladrillos», agregó el rotativo.
Hasta hace poco, dice Barin, una de las mayores preocupaciones en Bruselas era que Trump llegara a un acuerdo con el presidente chino Xi Jiníng que dejara a Europa al margen, como hizo en su primer mandato con el «malogrado acuerdo comercial de la ‘fase uno'».
El 2 de abril, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva que implementaba aranceles recíprocos a las importaciones de varios países. La tasa arancelaria base se estableció en el 10%, con tasas más altas aplicadas a 57 países en función del déficit comercial de Estados Unidos con cada nación específica.
El 9 de abril, Trump declaró que se impondría un arancel base del 10% durante 90 días a más de 75 países que no habían tomado represalias y habían solicitado negociar, excepto China.
A medida que avanzaba la guerra comercial, los aranceles estadounidenses sobre los productos chinos alcanzaron el 145%, mientras que los aranceles de China sobre las importaciones estadounidenses llegaron al 125%.