«Acepté la invitación del primer ministro de Malasia (Anwar bin Ibrahim) para participar en la reunión de la Asean en octubre», anuncio Lula en su alocución en el comienzo del encuentro empresarial en Río de Janeiro.
También aprovechó la ocasión para invitar a los hombres de negocios brasileños a unirse al Gobierno y viajar a Malasia para abrir nuevos mercados. En la cita se encuentra el primer ministro de ese país, uno de los 10 asociados del Brics y actualmente al frente del bloque en el Sudeste Asiático.
Al departir en el foro, el vicepresidente Geraldo Alckmin afirmó que, en los últimos 10 años, las reuniones del Brics se convirtieron en actor clave de la geopolítica planetaria, pues el bloque es el motor de la economía global.
«Los Brics son el motor de la economía global. Representan más del 40 por ciento del PIB (Producto Interno Bruto) mundial y crecen muy por encima del promedio mundial. Por lo tanto, son promotores del desarrollo global», apreció Alckmin.
Destacó la importancia de este encuentro para promover «oportunidades de inversión recíprocas entre nuestros países, fortalecer el comercio exterior e impulsar la innovación para que podamos avanzar aún más». Organizado por la Confederación Nacional de la Industria, el foro debe tratar asuntos como el fortalecimiento del comercio, la seguridad alimentaria, la transición energética, la descarbonziación y las estrategias de financiación para el desarrollo sostenible de las naciones del grupo.
La Cumbre del Brics, espacio de deliberación entre jefes de Estado y Gobierno, está inicialmente programada para comenzar mañana y extenderse hasta el lunes en Río.
Brasil, que preside el bloque este año, eligió como ejes de actuación la cooperación del Sur Global y la reforma de la gobernanza general.