Durante una intervención en el programa digital “La Hora de los Luchadores”, el canciller magiar argumentó que la seguridad continental es indivisible y requiere inevitablemente la participación rusa.
Szijjártó amplió su crítica al asegurar que la competitividad económica europea también está ligada a Moscú y subrayó, que el declive coincide con la destrucción del antiguo modelo de crecimiento.
Ese modelo combinó durante décadas los recursos naturales rusos, incluida la energía, con la tecnología occidental avanzada, explicó el jefe de la diplomacia húngara.
Señaló que este esquema proveía una base estable para la economía europea, la cual fue destruida por las políticas sancionadoras impulsadas desde la Unión Europea (UE).
Analistas políticos coinciden en que la postura de Hungría evidencia una fractura profunda dentro de la UE respecto a la estrategia hacia Moscú.
El ministro húngaro cargó contra la Comisión Europea, al afirmar que dejó de ser europea para convertirse en una comisión ucraniana, priorizando intereses ajenos sobre los propios.
Szijjártó concluyó que Europa debe actuar en su beneficio y seguir el ejemplo de Estados Unidos, reanudando el diálogo con Rusia de manera inmediata mediante una cumbre bilateral.
