Un centenar de personas se ha reunido en una de las plazas más importantes de la capital francesa en protesta por la muerte de un ciudadano chino a manos de la Policía. Algunos manifestantes han comenzado a lanzar petardos a los uniformados, quienes han respondido con gases lacrimógenos.
Según informan medios locales, la multitud reclama «libertad» y «justicia» en torno al asesinato de Liu Shaoyao, de 56 años, quien perdió la vida la semana pasa en circunstancias controvertidas.
Con carteles que abogan por la paz, la verdad y el rechazo a la violencia, miembros de la comunidad china en París, también marcharon por las calles de la Plaza de la República con rosas blancas en la mano.