El Ministerio ruso de Asuntos Exteriores ha entregado este miércoles una nota al ministro consejero de la embajada de Moldavia en Rusia, Nicolae Miinea, en la que declara que “en respuesta a la expulsión de cinco diplomáticos rusos de Chisináu (capital moldava) el 29 de mayo, cinco empleados de la misión diplomática de Moldavia han sido declarados personas ‘non gratas’ y tienen que abandonar la Federación Rusa en tres días”.
Asimismo, la Cartera rusa ha manifestado su deseo de que las autoridades moldavas se den cuenta de que sus “acciones hostiles” contra Rusia fueron “contraproducentes” y “destructivas”, y de que su medida “contradice los principios de cooperación y confianza mutua”.
Horas después, el Ministerio ruso ha presentado una nota similar a la embajada de Estonia en Rusia.
«En respuesta al paso provocador de Tallin se ha tomado la decisión de declarar personas ‘non gratas’ al cónsul general de Estonia en San Petersburgo, Jaanus Kirikmae, y al jefe de la representación de ese consulado en la región de Pskov, Katrin Kanarik», según el texto.
Además, precisa que los dos diplomáticos estonios «deben abandonar los límites de Rusia en un plazo de cinco días».
«La política destructiva de las autoridades estonias se reflejará inexorablemente de la manera más negativa en las relaciones bilaterales. Toda la responsabilidad sobre las consecuencias de esa política recae sobre la parte estonia», reza la nota.
El pasado 26 de mayo, la Cancillería estonia decidió expulsar a dos diplomáticos rusos sin precisar motivos para ello. Tres días después, el Ministerio moldavo de Asuntos Exteriores declaró personas ‘non gratas’ a cinco diplomáticos rusos y les dio 72 horas para abandonar el país.
Por su parte, la Cartera de Exteriores rusa calificó la medida del Gobierno estonio de “provocativa y sin fundamento” y dejó muy claro que no quedaría sin una respuesta apropiada.
