Bajo el lema Gudariak direlako, amnistía!, el movimiento ATA (Amnistía Ta Askatasuna) desarrolló una marcha en defensa de los presos de ETA, un día después de la manifestación impulsada por la iniciativa Kalera Kalera promovida por Sortu. Un mismo reclamo pero desde distintas posiciones. Los orígenes de este divorcio se remontan al año 2013, cuando el Colectivo de Presos Políticos Vascos (EPPK) anunció que sus miembros estaban dispuestos a recorrer el camino de la legalidad para acogerse a beneficios penitenciarios.
Desde ATA sostienen que la diferencia estriba en que “estamos hablando de una postura revolucionaria, que habla de dejarse de utopías, frente a otra posibilista como plantea Sortu”. No en vano, ATA disiente de la apuesta por las “salidas individuales” que promueve el EPPK para quienes siguen en la cárcel. “Nosotros preferimos llamarlas salidas individualistas”, abogan desde este movimiento.
ATA justificó la marcha de ayer porque los presos siguen “en la cárcel, en la deportación o en el exilio por luchar a favor de la independencia de Euskal Herria y el socialismo”, de ahí que insten al Gobierno de Pedro Sánchez a declarar para ellos la amnistía de manera unilateral. Una demanda que fundamentan también “porque hicieron frente a los Estados español y francés;porque se levantaron contra los mercenarios armados que apalean a manifestantes, huelguistas y, en general, al movimiento popular;porque han sido imprescindibles para impulsar la lucha a favor del euskera;o porque son ejemplo de solidaridad y compromiso”.
Igualmente, en su comunicado aducen que la amnistía tiene base ya que “se enfrascaron en la lucha para terminar con la impunidad de los torturadores;porque el terrorismo de Estado no les ha hecho claudicar;porque han dejado al descubierto el carácter fascista de la Audiencia Nacional española;porque han gritado alto a las fuerzas de ocupación que se vayan;por demostrar que el único camino para la supervivencia de la cultura vasca es la lucha;y por apoyar las reivindicaciones de la lucha obrera”. Por último, también la ven plausible porque los miembros de la banda armada se posicionaron “contra los proyectos devastadores que destruyen la madre tierra, y porque estamos orgullosos de su lucha”. Y concluyen su razonamiento: “Porque son gudaris”.
