Londres, 25 sep (Sputnik).- El Gobierno británico confirmó que trabaja para acoger a los activistas de la ONG Cascos Blancos evacuados de Siria.
“En virtud de la práctica establecida ‘Esquema de Reasentamiento de Personas Vulnerables’ (VPRS, por sus siglas en inglés), el Ministerio del Interior coopera estrechamente con el Acnur, el Departamento para el Desarrollo Internacional y el Ministerio de Vivienda, Comunidades y Gobierno Local, para reubicar (al Reino Unido) a las familias (de los Cascos Blancos)”, dice el comunicado.
El canciller británico, Jeremy Hunt, destacó en la nota que los voluntarios de los Cascos Blancos mostraron con sus acciones en Siria “un verdadero heroísmo moderno”.
“Son merecidamente respetados por su labor valiosa de salvar vidas, y antes fueron nominados al Premio Nobel de la Paz”, recordó.
Según el texto, la ONG “salvó más de 115.000 vidas” en Siria.
La ONG Cascos Blancos se define políticamente neutral y no beligerante, dedicada a la protección de civiles en Siria, aunque junto con los vídeos en los que Cascos Blancos rescatan a niños de las ruinas, también aparecieron en la web las imágenes en que se ve cómo manipulan las filmaciones, maquillando a las víctimas y dictándoles lo que deben declarar ante las cámaras.
Según la organización, sus principales donantes son la fundación Mayday Rescue (financiada por el Reino Unido, Dinamarca, Países Bajos y Alemania) y la empresa Chemonics, con sede en Washington.
A finales de julio pasado las Cancillerías de Israel y Jordania comunicaron que unos 800 empleados de los Cascos Blancos y sus familias fueron evacuados de Siria, y el Reino Unido, Alemania y Canadá se ofrecieron a acogerlos.
El presidente sirio, Bashar Asad, afirmó que en realidad los Cascos Blancos son parte del grupo terrorista Al Qaeda (prohibido en Rusia).
La Cancillería rusa califica la labor de los Cascos Blancos como un elemento de la guerra informativa dirigida contra Damasco.
La semana pasada la agencia de noticias estatal siria SANA publicó un vídeo de la escenificación de un ataque químico en la gobernación de Idlib preparada por los Cascos Blancos con el fin de acusar al Ejército de Siria del uso de armas químicas. (Sputnik)
