El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acepta la ayuda de la Unión Europea (UE) y asegura que su país pagará todo lo que le envíe el bloque.
“La Unión Europea mandó una comisión de diálogo y la recibió el canciller (Jorge Arreaza) y la vicepresidenta ejecutiva (Delcy Rodríguez). Nos hicieron saber que están dispuestos a enviar apoyo y ayuda humanitaria legal, muy bien, le dije, aprobado, (…) Todo lo que envíen, Venezuela lo va a pegar, no somos mendigos”, afirmó el jefe de Estado venezolano en un acto multitudinario celebrado el sábado en Caracas (capital venezolana).
Además, Maduro declaró que su Administración ha entregado una lista de necesidades a los enviados del bloque comunitario y aseguró que pedirán a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que vigile que se entregue el apoyo.
“Le dijimos que nos están bloqueando medicinas, le dimos la lista, que nos están bloqueando alimentos y le dijimos, vamos a coordinar con la ONU para ver si cumplen la oferta”, puntualizó.
De igual modo, el mandatario latinoamericano se ofreció a comprar los camiones de asistencia humanitaria que están entrando por las fronteras que Venezuela comparte con Brasil y llegar a un convenio con los empresarios del país vecino.
Maduro tomó tal decisión después de que fallara el intento intervencionista de EE.UU. y sus aliados regionales, como es el caso de Colombia, que consistía en la entrada de camiones cargados de ayuda humanitaria al país bolivariano para asistir al opositor Juan Guaidó, jefe de la Asamblea Nacional (AN) de Venezuela —de mayoría opositora y declarada en desacato desde 2016— se autoproclamó el pasado 23 de enero, de manera inconstitucional, presidente encargado de Venezuela.
A juicio del presidente venezolano, dicho proceder se traduce en un intento de intervenir militarmente en el país sudamericano, razón por la cual anunció el viernes que el Gobierno venezolano había decidido cerrar sus fronteras con Colombia para evitar la entrada del convoy humanitario.
Ante esta situación y después de jornadas bastante tensas por el varamiento de tal ayuda en la zona fronteriza colombo-venezolana, que provocaron, además, que “una policía nacional bolivariana y una periodista chilena” resultaran heridas, Caracas anunció la ruptura de relaciones con Colombia.
