Bajo la premisa de que «todo vale», establecida en política internacional por Donald Trump y sus asesores, el mandatario norteamericano le aseguró a la cadena Fox News que la semana próxima «sucederían muchas cosas en Venezuela, algunas de ellas muy duras», a la vez que reiteró que «todas las opciones están sobre la mesa», lo cual apunta hacia el uso de la fuerza militar.
Según Trump, Maduro «estaría perdiendo el control del país» por lo que Estados Unidos proyecta un golpe mayor que el orquestado tras la liberación de Leopoldo López y que fuera derrotado con rapidez.
Reuters, por su parte, recientemente develó que Academi, una empresa contratista privada, estaría comisionada para crear un ejército mercenario de 5 000 soldados, con el fin de traducir el suceso en una guerra civil en Venezuela; dicho plan fue denunciado por el Gobierno bolivariano, como una evidencia más de que las «protestas» de la oposición en el país son pagadas y organizadas en Washington.
Según trascendió, el plan de los mercenarios surge a raíz de que fracasaran sucesivos intentos de reclutar a militares de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, un proceso que culminó con el lanzamiento de la fake news de que su líder, Vladimir Padrino, estaría negociando de forma oculta con Estados Unidos. Una matriz desmentida por el propio oficial en jefe mediante diversos comunicados.
«Ellos no tienen gente, y en el chavismo no van a conseguir lo que están buscando, es una gran campaña mediática internacional para que la gente crea que el pueblo (venezolano) está dividido», dijo el jefe de la Asamblea Nacional Constituyente Diosdado Cabello, sobre las mentiras lanzadas por el enviado especial Elliott Abrams sobre una supuesta conjura entre Padrino y el imperio.
LAS FAKE NEWS, ARMA NO CONVENCIONAL
Los bulos se han hecho virales a raíz del nuevo estilo de gobierno de Washington, así el secretario de Estado Mike Pompeo quiso ocultar el sabor a derrota de este 30 de abril, declarando que «Maduro permaneció en Caracas, porque Moscú lo obligó a hacerlo», con lo cual refuerzan además otra fake news: la trama rusa en Venezuela.
«Si recordamos todas las afirmaciones de los representantes oficiales de la administración estadounidense sobre Venezuela, no van a terminar las preguntas sobre ellas, y la respuesta a todas esas preguntas será: no es verdad», aseguró Serguéi Lavrov, canciller ruso.
La locura de la administración Trump amenaza con destrozar al hemisferio y a los propios Estados Unidos, al punto en que el imperio ya está creando un grupo de presión en las Naciones Unidas, para imponer una agenda injerencista y militar en Venezuela, a la cual Rusia contrapone otro grupo de países, con el fin de que no se viole el ya frágil equilibrio político internacional. Dichos planes en el seno de la ONU serían la coartada para legitimar el ejército mercenario que se está gestando.
«Espero que el grupo goce de un apoyo considerable en la organización, porque se trata de una cosa muy sencilla: defender las normas y los principios fundamentales del Derecho Internacional, fijados en la Carta de la ONU», subrayó Lavrov acerca de la iniciativa rusa en el seno de la organización internacional.
El Canciller ruso declaró que sostuvo una conversación de alto nivel con Mike Pompeo, donde le advirtió sobre lo improcedente de la Doctrina Monroe, también le aseguró que Rusia no interfiere en los asuntos internos de los Estados. «Creo que esa intención anunciada de volver a una doctrina que tiene 200 años refleja la falta de respeto hacia el pueblo venezolano y los países de América Latina», apuntó Lavrov.
La Doctrina Monroe, de 1823, es famosa por la frase de James Monroe: «América para los americanos», lo cual se refiere a que Estados Unidos sería la potencia con derecho a actuar de manera impune y exclusiva en el área latinoamericana.
