Europol, en su informe anual, especifica que el 45 % de los ciudadanos británicos que viajaron a Siria e Irak para unirse al EIIL (Daesh, en árabe), ha regresado a su patria, según recogió el domingo el portal estadounidense de noticias Breitbart.
La cifra es “muy preocupante” y alarmantemente “grande” en comparación con los terroristas repatriados por otros países europeos, añade la publicación, antes de mencionar que tras el Reino Unido, Alemania, con el 33 %, y España y los Países Bajos, con el 18 % cada uno, cuentan con el mayor número de extremistas takfiríes repatriados.
Los que fueran integrantes de Daesh, pese a romper sus lazos con la banda extremista, aún pueden representar una seria amenaza para Europa debido a los entrenamientos que recibieron y a la ideología que practicaban, advierte la Europol.
“El entrenamiento y la experiencia de estas personas en el manejo de armas y dispositivos explosivos los convierte en serias amenazas”, se lee en el informe, donde también se refleja la preocupación de la Unión Europea (UE) por los esfuerzos de dichos exterroristas para crear redes extremistas tanto dentro como fuera de sus países de origen.
Europa, que ha desempeñado un papel no despreciable en la creación y propagación del terrorismo, no tiene, al parecer, otro remedio que recibir a los ciudadanos que se unieron a las filas de Daesh, entre otros grupos terroristas, en el Oriente Medio, dado que el presidente de EE.UU., Donald Trump, amenazó en febrero a sus aliados europeos con que si no recibían a los terroristas capturados los liberaría a todos.
“EE.UU. ha solicitado al Reino Unido, Francia, Alemania y a otros aliados europeos que tomen de vuelta a más de 800 milicianos del EIIL que capturamos en Siria y les procesen”, tuiteó el mandatario norteamericano.