La Misión de Verificación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Colombia manifestó su preocupación por los asesinatos contra ex miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP), quienes de buena fe dejaron las armas.
En un comunicado difundido este sábado, la entidad internacional condenó el homicidio del integrante del partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC), Wilder Daniel Marín Alarcón, ocurrida el jueves 7 de los presentes en el municipio de Bello, en el noroccidental departamento de Antioquia.
El partido FARC denunció el sábado el asesinato del ex insurgente, quien fue encontrado por las autoridades envuelto en un colchón incinerado, señala TeleSUR en su sitio web.
Marín Alarcón se encontraba en proceso de reincorporación en la ciudad de Medellín, capital del departamento de Antioquia.
La misión de la ONU que verifica el cumplimiento de los acuerdos de paz, suscritos entre el Gobierno colombiano y las desmovilizadas FARC-EP en 2016, subrayó que con Wilder “son ya 24 los casos de asesinatos, en el año 2020, de quienes están comprometidos con su proceso de reincorporación”.
Indicó que desde el inicio de la cuarentena, impuesta en Colombia para combatir el Coronavirus Covid-19, se han registrado por fuentes nacionales, seis asesinatos de ex combatientes y de al menos 32 líderes sociales.
“Desde la firma del Acuerdo Final de Paz han sido asesinados 198 personas en proceso de reincorporación”, lamentó la Misión de la ONU.
Instó a las autoridades colombianas “a la profundización de medidas para el desmantelamiento de organizaciones criminales y sus redes de apoyo, con el fin de garantizar la seguridad de excombatientes, líderes sociales y defensores y defensoras de los derechos humanos”.
Prensa Digital MIppCI / TeleSUR / Gráfica Redes Sociales