La Marina de los Estados Unidos, deliberamente para enfrentar a China, está enviando una vez más barcos al Mar de China Meridional, y el comandante almirante John Aquilino justifica la operación insistiendo que «el Partido Comunista Chino debe poner fin a su patrón de acoso».
China tiene reclamaciones marítimas sustanciales en el Mar de China Meridional, y en la medida en que entran en conflicto con las de otras naciones, los Estados Unidos siempre han respaldado las afirmaciones de las otras naciones., comenta el portal antiwar.com.
Estados Unidos envía regularmente barcos al Mar de China Meridional, cerca de las islas reclamadas por China, para demostrar que pueden hacerlo. El almirante Aquilino dice que los buques estadounidenses defienden la «libertad de los mares y el estado de derecho».
Agrega que estos son barcos menores y probablemente no se registrarán como una amenaza para China. Estados Unidos está enviando el pequeño barco de combate litoral, el USS Montgomery, y un barco de carga seca a la zona cercana de operaciones de un buque de perforación de Malasia, y los funcionarios ven el despliegue como un intento estadounidense de respaldar a los malasios sobre los chinos, apunta antiwar.com.
El ejército estadounidense ha estado aumentando sus actividades en la región, que incluyen múltiples operaciones de «libertad de navegación» de la Marina de los Estados Unidos y un bombardero de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos sobrevolando la zona el mes pasado, entre otras acciones.
No obstante, desde la parte china se critica duramente el papel que juega Washington y que, en su opinión, pone en riesgo la paz y la estabilidad.
«El verdadero escándalo (…) no es que China esté ejerciendo su soberanía en el mar de China Meridional, es que EE.UU. haya tratado de evitar que lo hiciera todo este tiempo», escribía en abril Andrew Korybko, analista político de la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos, en un artículo de opinión publicado por el canal estatal chino CGTN.
«EE.UU., pese a anunciar su derecho a la soberanía nacional en todos los ámbitos bajo la administración Trump, ha hecho todo lo posible para vulnerar la de China, especialmente en el mar de China Meridional», apuntaba el articulista, citado por la BBC.
Recientemente, el contralmirante Fred Kacher, comandante del Grupo de Asalto Expedicionario 7 de Estados Unidos niega que las tensiones provengan de su presencia en la zona y alega que «la Armada estadounidense opera de manera rutinaria en aguas internacionales del mar de China Meridional y lo hemos estado haciendo durante más de 75 años, y contribuimos a la estabilidad y la seguridad de esta región», defendió.
La situación se da en medio de unas lentas negociaciones pero que pueden ser claves para sellar un Código de Conducta en la región, de la mano de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y China, un dialogo que busca un «compromiso aéreo y marítimo, para minimizar la posibilidad de incidentes», resumia Shen Dingli, director del Programa de Control de Armas y Seguridad Regional de la Universidad de Fudan, en Shanghái, según BBC.
Sin embargo, el contralmirante retirado de la Marina estadounidense Terry McKnight, quien lamenta que «se está hablando de que el Departamento de Defensa quizá reduzca el número de portaaviones», apuntalaba la posición belicista provocadora: «Si Estados Unidos quiere seguir siendo una potencia marítima dominante a nivel global, tenemos que continuar operativos en la región del mar de China Meridional».
