Imagínense que la izquierda llegara a varios gobiernos del Sur de Europa y aplicara decididas políticas públicas. Y que, afectados ciertos intereses transnacionales, EEUU les impusiese una guerra comercial. ¿España permitiría que miembros de organizaciones españolas, con fondos de la Casa Blanca, se dedicaran a destruir su industria turística? ¿Francia permitiría que supuestos activistas de derechos humanos, pagados por Washington, alentaran el bloqueo total a su economía?
Fuente original en Cubainformación TV: https://www.cubainformacion.tv/especi…