Manifestantes derribaron la estatua de Theodore Roosevelt en Portland (Oregón, EE.UU.) la noche del 12 de octubre en protesta por el genocidio que sufrieron los pueblos indígenas durante el proceso de colonización.
Según los historiadores, el 26.º presidente estadounidense Theodore Roosevelt mostró hostilidad hacia los nativos americanos y se le atribuyen declaraciones como esta: “Yo no iría tan lejos como para decir que el único indio bueno es el indio muerto, pero creo que nueve de cada diez lo son”.
El disturbio continuó con la destrucción de ventanas y el derribo de la estatua de Abraham Lincoln, donde pintarrajearon con spray “Dakota 38”, en referencia a los 38 hombres que fueron sentenciados a muerte por Lincoln tras enzarzarse en un violento enfrentamiento con colonos blancos.
