En todo México se empiezan a repetir las escenas de largas filas de personas buscando comprar un tanque de oxígeno para sus familiares enfermos de covid-19. La crisis sanitaria ha provocado que en la Ciudad de México los hospitales alcancen una ocupación del 88 %. Y eso, a pesar de que miles de personas evitan a toda costa pisar un centro médico y se aferran al tratamiento en su domicilio.