Assange cumplió 50 años el viernes, sentado en la prisión de Belmarsh de Londres. El gobierno de Estados Unidos busca extraditar a Assange y juzgarlo por cargos de espionaje, relacionados con la publicación de documentos que alegan crímenes de guerra estadounidenses en Irak y Afganistán, y, aunque un juez británico dictaminó en enero que no podía ser extraditado a Estados Unidos debido Debido a las preocupaciones sobre las condiciones carcelarias en Estados Unidos, no se le ha concedido la libertad bajo fianza.
«Me he quedado sin improperios para estos imbéciles que han encarcelado a Julian Assange», dijo Waters a RT el martes.
Waters ha sido un firme defensor de la liberación de Assange desde que el fundador de WikiLeaks se refugió por primera vez en la embajada ecuatoriana de Londres en 2012, pero admitió que las protestas que dirigió y en las que habló no han movido a los políticos de ambos lados del Atlántico a liberar a Assange.
Julian Assange es un editor que no ha cometido ningún delito «, dijo Waters, y señaló que» los poderes fácticos tienen oídos sordos a su situación «y parecen felices de mantenerlo» bajo llave hasta que muera, lo que parecen estar decididos a hacer «. haciendo.»
Cuando Assange celebró su cumpleaños, los manifestantes en el Reino Unido y Estados Unidos salieron a las calles exigiendo su liberación. Los manifestantes en Londres navegaron en un bote pasando por las Casas del Parlamento, mientras un grupo en Washington, DC se reunió frente al Departamento de Justicia, que acusó a Assange de una letanía de delitos de espionaje que podrían llevarlo a pasar 175 años tras las rejas si es declarado culpable.
Waters le dijo a RT que, aunque el movimiento pro-Assange ha ganado cada vez más apoyo público en los últimos años, los políticos y los principales medios de comunicación siguen mirando para otro lado. El líder de Pink Floyd recordó una protesta en Londres el año pasado en la que “marchamos desde la embajada de Australia a Parliament Square e hicimos nuestros excelentes discursos y planteamos todos los puntos que todos hemos hecho una y otra vez … y el gobierno tomó absolutamente sin aviso».
«¿Dónde están todos los periodistas que deberían estar en las calles manifestándose?» preguntó, después de contar una serie de historias infundadas publicadas sobre Assange que lo retrataban como un misógino, un violador y un vándalo. “No se ve por ningún lado. Desafortunadamente, los principales medios de comunicación están intimidados por la clase dominante y los poderes fácticos».
«Todos aquellos de nosotros que nos preocupamos por los derechos humanos y que realmente nos preocupamos por la libertad … lo encontramos muy difícil frente a unos medios de comunicación que son comprados y pagados por la clase dominante, y mantienen la boca cerrada».
Esos mismos medios ignoraron en su mayoría las noticias de la semana pasada de que un testigo clave en el caso de Estados Unidos contra Assange admitió recientemente haber mentido. El testigo, un voluntario islandés de WikiLeaks convertido en informante del FBI, Sigurdur Ingi Thordarson, dijo a un periódico islandés que Assange nunca le ordenó que llevara a cabo ningún pirateo informático, a pesar de testimonios anteriores de lo contrario.
Waters no se deja intimidar por la resistencia del gobierno y los medios de comunicación. “Somos fuertes y no nos vamos a ir”, declaró.
«Creo que comenzaré una campaña ahora», dijo Waters para terminar. “Quiero una estatua de Julian Assange en la Plaza del Parlamento, señalando con el dedo las Casas del Parlamento, porque ahí es donde pertenece. Es un gran héroe de nuestro tiempo.”
