Los talibanes empezaron a entrar este domingo en la capital afgana, Kabul, comunicó el Ministerio del Interior del país.
Por su parte, el líder del movimiento en Doha (Catar) señaló que los talibanes ordenan a los combatientes que se abstengan de cometer actos violentos en Kabul, que permitan el paso seguro a quien decida salir y que pidan a las mujeres que se dirijan a zonas protegidas.
Los insurgentes islamistas han tomado la mayoría de las principales ciudades afganas, mientras Estados Unidos y otros países occidentales se preparan para evacuar a sus diplomáticos y ciudadanos.
Esta semana, los radicales declararon que se hicieron con el control de Kandahar y Herat, la segunda y tercera ciudades más importantes de Afganistán, así como de la estratégica Ghazni y Mazar-e Sarif, capital de la provincia de Balj y localidad más grande del norte del país.
Por su parte, el presidente de Afganistán, Ashraf Ghani, afirmó este viernes que la reestructuración de las Fuerzas Nacionales de Defensa y Seguridad del país (ANDSF) es una prioridad absoluta y prometió evitar más derramamiento de sangre. “Sé que están preocupados por su presente y su futuro, pero les aseguro, como su presidente, que mi objetivo es evitar más inestabilidad, violencia y desplazamiento de mi pueblo”, subrayó.