Aumentan las críticas contra EE.UU. y sus aliados de la OTAN por la crisis de gobierno y la catástrofe humanitaria en Afganistán. Las últimas declaraciones de los líderes occidentales echan más leña al fuego, como es el caso de Joe Biden, quien aseguró en una entrevista que «el caos era inevitable». Por su parte, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrel, se muestra preocupado ante la posibilidad de que Rusia y China tomen control enmedio de la grave situación.