
«Recibimos un gran número de solicitudes de todo tipo de voluntarios de diferentes países que quieren venir a las repúblicas populares de Luhansk y Donetsk para participar en lo que consideran un movimiento de liberación. El mayor número procede de Oriente Medio: ya hay más de 16.000 solicitudes», dijo Shoigu (citado del sitio web del Kremlin).
El presidente apoyó la propuesta, señalando que «los patrocinadores occidentales de Ucrania» ya están enviando mercenarios a la zona de guerra, y lo hacen abiertamente, «despreciando todas las normas del derecho internacional».
«Por lo tanto, si hay gente que quiere venir de forma voluntaria, sobre todo no por dinero, para ayudar a la gente que vive en Donbás, pues deberíamos encontrarnos con ellos a medio camino y ayudarles a trasladarse a la zona de guerra», dijo Putin.
También en la reunión, el ministro de Defensa informó al presidente de que los militares rusos habían acumulado muchas armas ucranianas, que podrían ser entregadas a las milicias populares de la RPL y la RPD. El presidente también apoyó esta propuesta. Además, pidió a Shoygu que presentara un informe separado sobre los planes para reforzar las fronteras occidentales de Rusia.
Anteriormente, el Ministerio de Defensa informó de que se habían reclutado masivamente combatientes de las compañías militares privadas estadounidenses y ciudadanos de varios países europeos para enviarlos a Ucrania. La inteligencia militar estadounidense participó en su reclutamiento.

