En el Palacio del Elíseo y acompañado por el canciller alemán, Olaf Scholz, el mandatario anfitrión afirmó que «Rusia no puede ni debe ganar», en alusión a un conflicto que Moscú considera una operación especial y occidente una agresión.
Nosotros seguiremos el esfuerzo de entrega de medios de defensa, dijo Macron a la prensa.
Por su parte, Zelensky reiteró la demanda de armamento pesado y de largo alcance, así como de aviones de combate.
El presidente ucraniano llegó a Francia procedente del Reino Unido, donde dialogó con el primer ministro Rushi Sunak, a quien también reclamó equipamiento bélico.
Rusia insiste en que el envío de más armas a Kiev agravará el conflicto y alejará la búsqueda de una solución negociada.
En los últimos días fue noticia la decisión de occidente, en particular de Estados Unidos, Reino Unido y Alemania, de entregar tanques a Ucrania, más de un centenar de ellos carros Leopard 1 germanos.
Zelensky centra ahora sus pedidos en cazas, lo cual apunta a una escalada de la guerra en el Este de Europa.
