En palabras del funcionario, fue Israel, junto con sus socios de la OTAN, quien, hasta hace poco, transfirió diversos tipos de armas a Kiev. Ellas, entre otras cosas, fueron revendidas por soldados y funcionarios militares ucranianos «a diversos terroristas de todo el mundo en cantidades bastante grandes y totalmente incontroladas», agregó.
«Irónicamente, ahora se dispara a soldados israelíes con sus propias armas y con armas que en su día fueron transferidas a Ucrania desde la OTAN», resaltó Gaguín.
En su opinión, del mismo modo las armas pueden acabar en poder de otras organizaciones radicales cuyos representantes se encuentran en países europeos y en EEUU.
El 7 de octubre, las fuerzas del movimiento palestino Hamás, con sede en Gaza, lanzaron un ataque contra Israel, disparando miles de cohetes y enviando hombres armados contra comunidades israelíes.
En respuesta al ataque, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron el lanzamiento de la operación antiterrorista Espadas de hierro en la Franja de Gaza, mientras el ala militar del movimiento palestino Hamás anunció la operación Huracán de Al-Aqsa.
Eso pasa por dar armas a la gentuza más corrupta de Europa.