Los titulares de Agricultura alegaron que se trata de una competencia desleal, pues los productos agrícolas ucranianos, más baratos, expulsan a los agricultores del bloque comunitario de sus mercados de exportación tradicionales.
De acuerdo con la solicitud, las naciones firmantes forman parte de los seis Estados miembros de la Unión Europea (UE) con mayores producciones de trigo y maíz, claves para la seguridad alimentaria europea y su soberanía estratégica.
Desde que la UE suspendió el año pasado las cuotas de importación y los derechos de aduana sobre el grano procedente de Ucrania, los países «han sufrido importantes perjuicios», aseguran los ministros.
Los ministros también solicitan al ejecutivo del bloque examinar si las directrices de producción de Ucrania se ajustan a las normas europeas.
En septiembre, Polonia, Eslovaquia y Hungría anunciaron restricciones a las importaciones de grano ucraniano, pero sólo se aplican a las importaciones nacionales y no afectan al tránsito hacia los mercados de destino.
