En su perfil en x, el canciller Bruno Rodríguez alertó del peligro para la existencia humana por los efectos adversos de fenómenos naturales, mientras la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), inventa otras amenazas.
La alianza guerrerista, en tal sentido, fabrica esas amenazas para incrementar sus exorbitantes gastos militares y sostener sus contaminantes industrias militares, malgastando recursos que se requieren con urgencia para la financiación climática, apuntó Rodríguez.
El gobierno de Cuba, por intermedio de su cancillería, ha reiterado la denuncia de la excesiva prioridad que conceden las potencias occidentales integrantes de la OTAN frente al compromiso ambiental, concertado en foros de Naciones Unidas.
La alianza bélica incrementa cada año su gasto militar, formalizando contratos para la adquisición de armas cada vez más letales que solo beneficia a su industria armamentista.
El jefe de la diplomacia cubana alertó recientemente en la propia red social que la huella del carbono militar de la organización transatlántica pasó de 196 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono (C02) en 2021 a 226 millones en 2023.
Esos guarismos superan las emisiones de gases de efecto invernadero del 80 por ciento de los países del mundo, refirió el Ministro de Relaciones Exteriores de Cuba.