De acuerdo con el diplomático, el conflicto entre ambas naciones resulta mucho más complejo que la propuesta de campaña de Trump, repetida en cada pronunciamiento al respecto.
Al presentar ante la prensa el programa de trabajo de Rusia al frente del Consejo de Seguridad en el mes de julio, el representante consideró además insuficiente el proyecto de paz propuesto por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
“Zelenski y el régimen andan por ahí con su llamado para la paz, que por supuesto no es el plan de paz, sino una broma”, dijo.
El embajador reconoció no obstante la necesidad de que los países occidentales dejen de suministrar armas a Ucrania, algo que puede tomar tiempo y, por supuesto, tener ciertas consecuencias políticas, advirtió.
Entre los temas incluidos en el plan de trabajo del Consejo de Seguridad, Nebenzya adelantó encuentros sobre Medio Oriente, en particular sobre Gaza, Yemen y Siria, incluido un debate abierto sobre el conflicto en la Franja y la situación humanitaria.
Además, la agenda prevé sesiones dedicada a la escalada de violencia en Haití y la revisión trimestral de la Misión de Verificación de Naciones Unidas en Colombia.
El máximo órgano para la paz del planeta acogerá además un debate abierto sobre el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, la cooperación multilateral en aras de una sociedad más justa, en el que participará el canciller ruso, Serguéi Lavrov.
El embajador ruso advirtió profundas divisiones dentro del Consejo que, a su juicio, seguirán dando forma a la geopolítica del futuro.
“El denominado mundo en desarrollo o más bien el sur global, en particular África, está sub representado en el Consejo de Seguridad, mientras que el Occidente colectivo, como yo lo llamaría, está sobre representado allí”, dijo.
Esto no refleja el estado actual de la geopolítica mundial, son procesos que están sucediendo, agregó.
