Según la comunicación del ente castrense publicada este miércoles por la agencia de noticias Sputnik, los efectivos del ejército privado Forward no son parte de una legión extranjera de georgianos o polacos perdidos, son militares profesionales.
Las tropas ucranianas perdieron miles de hombres desde que irrumpieron en la provincia fronteriza de Kursk el pasado 6 de agosto, remarcó la nota, y agregó que a pesar de ello, Kiev continua el envío de tropas a esa región.
Según un informe del Ministerio de Defensa, las fuerzas enemigas sufrieron más de 14 mil 200 bajas en esa zona desde el 6 de agosto.
Rusia desarrolla desde febrero de 2022 una operación militar para detener los bombardeos ucranianos contra los civiles de las regiones de Donetsk y Lugansk, territorios que se independizaron de Ucrania en 2014 y se adhirieron a Rusia en septiembre de 2022.
De acuerdo con el liderazgo ruso, los objetivos de la campaña militar son detener «el genocidio de los pueblos de Donetsk y Lugansk que cometía el gobierno ucraniano» y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hacia el este.
Ucrania es apoyada militarmente por la OTAN, el bloque bélico que lidera Estados Unidos e integran la mayoría de los países de la Unión Europea.
