“Es una intromisión de EEUU en un asunto de otro país, está fuera de lugar, no tiene sentido”, lamentó Lula en una entrevista con la radio O Povo.
Autoridades de EEUU solicitaron a la fabricante sueca de aeronaves información sobre la venta de 36 cazas militares Gripen a Brasil, un acuerdo que se cerró en 2014 por 5.400 millones de dólares.
La empresa afirmó en un comunicado que tiene intención de colaborar con las autoridades estadounidenses, pero aclaró que Brasil y Suecia ya investigaron el contrato y no encontraron “ninguna infracción”.
Lula dijo que no quería emitir un “juicio precipitado” al desconocer exactamente qué solicitó el Gobierno de EEUU, pero atribuyó la petición al hecho de que Brasil comprase aviones suecos y no estadounidenses.
En este sentido, citó otro episodio que ocurrió en su anterior mandato como presidente.
“A los americanos no les gustó cuando dije que quería comprar un Rafale [fabricado en Francia] querían que comprase uno de sus cazas”, añadió.
Lula hizo estas declaraciones en un momento en que explicaba que pretende comprar “algunos aviones”, después de que la nave presidencial tuviera un problema técnico cuando regresaba de un reciente viaje a México.
El presidente defendió la necesidad de comprar un avión nuevo para la Presidencia de la República y otros para que los ministros puedan viajar por el país, y afirmó que ya hizo el encargo al Ministerio de Defensa.
Que noticia más apabullante… Lula quiere comprar un avión (bueno), elige uno, vienen los yanquis a gritar que los suyos son los mejores (especialmente Boeing), Lula se defiende, el mundo se ríe…El presidente brasileño puede tranquilizar a los yanquis con una compra sólida, estratégica de papel higiénico…