La Cámara China de Comercio para la Importación y Exportación de Maquinaria y Productos Eléctricos (CCCME) emitió una declaración el 16 de octubre revelando que durante las negociaciones con la UE sobre la investigación antisubvenciones de vehículos eléctricos, la Comisión Europea había negociado compromisos de precios con algunos fabricantes de automóviles chinos por separado.
La CCCME añadió que se opone firmemente a este tipo de tácticas, argumentando que tal movimiento sacudiría los cimientos de las negociaciones y la confianza mutua, y perturbaría las negociaciones entre ambas partes.
En un editorial, el Global Times destaca que ese tipo de acciones por parte de las autoridades europeas no pueden ser tomadas a la ligera porque, además de afectar la credibilidad de la UE, pueden entorpecer las negociaciones.
«Este detalle dista mucho de ser trivial, ya que afecta no sólo a la credibilidad de la parte europea y a su respeto de las normas básicas de negociación, sino también a la dirección de esta importante negociación. Por lo tanto, la parte europea no puede hacerse la sorda e ignorar la oposición de la parte china», publica el diario chino.
El Global Times revela que, hasta el momento, las negociaciones no han alcanzado los acuerdos necesarios, pues siguen existiendo diferencias significativas entre ambas partes, que les impiden alcanzar una solución aceptable y atribuye esos desencuentros a la falta de una actitud negociadora sincera por parte europea.
«Es lamentable que sigan existiendo diferencias significativas entre ambas partes, que les impiden alcanzar una solución aceptable. La razón fundamental reside en la falta de una actitud negociadora sincera por parte europea, caracterizada por la incoherencia entre las palabras y los hechos. Incluso han llevado a cabo tácticas como la ‘doble negociación'», declara el medio de origen chino.
El medio ejemplifica dichas tácticas mencionando que la Comisión Europea promovió las «discusiones individuales», en un intento de socavar y dividir las demandas de la parte china mediante negociaciones individuales, así como de obtener una ventaja competitiva injusta.
«Esta práctica pone de manifiesto la mentalidad oportunista de la parte europea. Tales ‘trucos mezquinos’ no son ni dignos ni sabios y, en última instancia, resultarán ineficaces», concluye el diario.
A principios de octubre y aún con las negociaciones vigentes con China, los países de la Unión Europea aprobaron los aranceles a los vehículos eléctricos procedentes de China, según informó en esa oportunidad la Comisión Europea.
«Hoy [4 de octubre], la propuesta de la Comisión Europea de imponer aranceles finales a las importaciones de automóviles eléctricos de batería procedentes de China recibió el apoyo necesario de los Estados miembros de la UE», señala el comunicado de la autoridad europea.
