«A través de una acción que contradice la naturaleza y postulado de los BRICS, la representación de la cancillería brasileña (Itamaraty), liderada por el embajador Eduardo Paes Saboia, decidió mantener el veto que (Jair) Bolsonaro aplicó a Venezuela durante años (…), en una acción que constituye una agresión a Venezuela y un gesto hostil que se suma a la política criminal de sanciones que han sido impuestas contra un pueblo valiente y revolucionario, como el pueblo venezolano», señaló el comunicado difundido por el canciller de este país caribeño, Yván Gil, en su canal oficial de Telegram.
El Gobierno emite este pronunciamiento tras concluir la participación del presidente Nicolás Maduro y su delegación en la cumbre de este bloque que se llevó a cabo en la ciudad rusa de Kazán.
En el documento, Caracas manifestó que «ninguna artimaña o maniobra concebidas contra Venezuela detendrán el curso de la historia».
«El pueblo venezolano siente indignación y vergüenza por esta agresión inexplicable e inmoral de la cancillería brasileña (Itamaraty), manteniendo lo peor de las políticas de Jair Bolsonaro contra la Revolución Bolivariana fundada por el Comandante Hugo Chávez», añadió el texto.
Venezuela aseguró que contó con el respaldo y apoyo de los países participantes en la cumbre para la formalización de su ingreso a este mecanismo de integración.
«Venezuela engalana al Sur y el Este global con su firmeza en la defensa de la autodeterminación y la igualdad soberana de los estados», subrayó el comunicado.
Además, Caracas calificó como una «histórica» cumbre «por un nuevo mundo de paz, justicia y desarrollo compartido».
Venezuela agradeció al presidente de Rusia, Vladímir Putin, y a su Gobierno por la invitación cursada a Maduro para participar en dicho encuentro del bloque.
