C. Suárez (Unidad y Lucha).— En la primera quincena del año 2024 llegaron a Canarias un total de 7.270 migrantes desde el continente. Comparativamente, el año anterior esa cifra fue de 566. Ello supone un incremento del 1.184,5 % (Son datos oficiales de Marlaska).
La mayoría sale de Gambia o Senegal. Peligrosas rutas de más de 1.000 km, en embarcaciones precarias.
En 2023, en esos viajes, perdieron la vida 6.007 personas. Seguramente el número real es mayor.
Muchos niños son enviados solos. Sus familias buscan desesperadamente salvarlos. En Canarias hay más de seis mil de ellos en la actualidad.
Estos datos valen para introducir el tema.
DOS ASPECTOS DE LAS MIGRACIONES
Mirando las migraciones desde Canarias se constata la miseria moral, total y absoluta, del gobierno Clavijo-Domínguez (CC+PP). Su desprecio por la vida de las personas llegadas a las islas por esta vía no tiene límites. La cuestión se convierte en un comodín para las guerrillas con el Gobierno de Pedro Sánchez, para el regateo de fondos. Especialmente con los menores migrantes, donde este gobierno canalla llegó a aprobar un protocolo que terminaba enviando a esos menores a prisión. Afortunadamente anulado por la instancia judicial superior.
El fascismo rancio trata de prosperar con la manipulación del tema. Sin mucho éxito por ahora debido a la cultura migrante e internacionalista del pueblo canario, pero va avanzando posiciones, con el riesgo de llegar a ser peligroso.
Tenemos que mirar las migraciones también desde el otro lado, desde el continente.
¿Por qué vienen jugándose la vida de esta manera? ¿Por qué envían a los niños solos?
Siglos de robo y expolio del continente, desde el supremacismo blanco y colonial, especialmente por las multinacionales europeas, explica el origen de todo este problema..
Ayer el Emperador belga del Congo cortaba las manos, o los pies, a quienes no recolectaban suficiente cacao. Así se levantó el bienestar de ese pueblo europeo “civilizado, y tan culto”. Ayer también el saqueo de decenas de millones de habitantes para la esclavitud.
Las centrales nucleares francesas se abastecen (ya no) del uranio robado en Mali y Níger, mientras en esos países tan solo una mínima parte de la población tiene acceso al suministro eléctrico.
TODO ESTÁ MÁS CERCA
Un continente con más de 1.500 millones de habitantes, que viven en condiciones de extrema carencia y precariedad, y cuya esperanza de vida se sitúa en los 64 años, es explicación más que suficiente para comprender esas migraciones desesperadas. En República Centroafricana la esperanza de vida es de 53 años, en República Democrática del Congo 58 años.
En 1950, en plena etapa colonial, la esperanza de vida era de 35 años. Solo después de la primera descolonización la esperanza de vida fue aumentando. Pero siete décadas después la situación es la expuesta arriba. La población africana se ve privada de miles de millones de años de vida por las condiciones que imponen las potencias imperialistas, y por su dependencia de las antiguas metrópolis.
En la RDC se esclavizan niños para la extracción del coltán, también en otros países.
Huir es una cuestión de instinto de supervivencia básico frente al terror y al espanto.
El racismo juega un papel funcional al sistema de acumulación capitalista del eje imperialista anglo-yanki-sionista. El racismo se alienta y se configura desde la superestructura del sistema de dominación como una forma de legitimar/naturalizar la barbarie sobre el continente africano.
Petróleo, uranio, diamantes, coltán, etc. África tiene unas inmensas riquezas que son estratégicas para la actual economía mundial. La RDC posee el 80% de las reservas mundiales de coltán. Solo ese recurso sería suficiente para un cambio radical en las condiciones de vida de su población. Pero ocurre justo al revés. Las grandes multinacionales saquean ese recurso, obligan a trabajar en condiciones miserables e insalubres, y provocan y financian todo tipo de guerras para un mejor control del saqueo/expolio. Así se garantiza el funcionamiento de miles de millones de teléfonos móviles, y otros artilugios electrónicos.
La mina de oro a cielo abierto de Tasiast, en Mauritania, está controlada por la empresa canadiense Kinross Gold. El metal se saca con aviones directamente desde la mina al exterior. En el país solo queda la cantidad necesaria para mantener al gobierno corrupto.
PANAFRICANISMO
La gran esperanza frente a esta lógica de la barbarie y el expolio son los movimientos panafricanistas, que hoy están en alza.
Vuelven Sankara, Chris Hani, Cabral, Nkrumah y Lumumba, guiando procesos antiimperialistas que luchan por la definitiva independencia. Se da un cierto paralelismo con las luchas en nuestrAmérica.
Aquí, la respuesta necesaria a estas luchas se ha de dar desde un consecuente internacionalismo proletario. Internacionalismo necesariamente despojado de cualquier contaminación ideológica del racismo y el supremacismo inyectados por los centros imperialistas, como superestructura conceptual legitimadora del expolio “de esos pueblos ignorantes y bárbaros”.
